miércoles, 17 de febrero de 2010

Momentos sin aliento

A veces los recuerdos más bonitos, los recuerdos más intensos…son los más duros de todos. Y sin embargo, lo que cada día simplemente es una rutina, un par de sonrisas, no somos capaces de apreciarlo hasta que de repente todo cambia. Rodeados cada día de almas que nos acompañan en la existencia, nos perdemos a la deriva cuando encontramos un nuevo cielo. Un cielo de escasos días, por no decir horas, que nos atrapa, nos arrastra a su antojo hasta arrancarnos un hálito de vida.

Pero son esos detalles los que nos recuerdan que el camino no está marcado, que es uno mismo quien construye cada paso. Cada uno es dueño de sus demonios. Porque la vida no se mide por las veces que respiras sino por las veces que te quedas sin aliento. Porque la vida no la marca lo que dura un sentimiento, sino la intensidad con que sucede y hasta cuando viaja en la memoria.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy bonito Jaime

NéMESIS dijo...

gracias,,,kien digna ser detras del comentario??